La Rueda de la Fortuna, carta número diez, es una carta positiva que representa tres animales sobre una rueda, la cual parece estar tallada en el tronco de un árbol. Estas tres figuras incluyen una gárgola en la parte superior de la rueda, quieta e inmóvil, un perro ascendiendo con ímpetu y agarrándose firmemente a la rueda, y un mono descendiendo en movimiento. Este ciclo circular simboliza los cambios y nuevos comienzos en la vida.
La representación de la rueda tallada en un tronco se relaciona con la superstición asociada a esta carta. Tocar un trozo de madera se considera un gesto para atraer buena suerte y evitar desgracias. Esta superstición tiene sus orígenes en el cristianismo, donde se creía que tocar la cruz de Jesucristo proporcionaba protección. Es una costumbre muy aceptada y la expresión es muy parecida en gran cantidad de idiomas y muy extendida alrededor del mundo.
Ciclos de cambio: La Rueda de la Fortuna al derecho indica que estás experimentando cambios importantes y ciclos en tu vida. Puede haber eventos inesperados que te lleven en nuevas direcciones.
Destino y oportunidades: Esta carta sugiere que el destino está en movimiento y se están abriendo nuevas oportunidades para ti. Es un momento para estar abierto a las posibilidades y aprovechar los cambios positivos.
Flujo y evolución: La Rueda de la Fortuna al derecho también representa el flujo natural de la vida y la evolución constante. Estás en un período de crecimiento y desarrollo personal.
Bloqueo de cambios: Cuando la Rueda de la Fortuna aparece invertida, puede indicar obstáculos o bloqueos que impiden el flujo natural de los cambios en tu vida. Puedes sentirte estancado o atrapado en una situación.
Resistencia al destino: En esta posición, la carta invertida puede señalar resistencia al destino o negación de las oportunidades que se te presentan. Puedes estar luchando contra los cambios que son necesarios para tu crecimiento.
Altibajos y estancamiento: La Rueda de la Fortuna invertida también puede representar altibajos y estancamiento en tu vida. Es un momento para evaluar qué está impidiendo tu progreso y tomar medidas para desbloquear la energía estancada.
